AVALANCHA DE SOL ENTRE LAS FLORES
Antes de ser luz, fui árbol.
Fluía la savia en mis venas
creando caminos de dunas verdes,
estriados y laberínticos.
Mi Yo germinaba el fruto
que los errores pudrían
y extendía raíces hasta lo profundo
del llanto, de las dudas, de las brujas,
del misterio que el Ser lleva consigo.
Y, ahora que no me soy,
que me acoplo perfecta
al cuenco de tus manos,
recuerdo que
antes de ser árbol, fui agua.
Tan en mí me fundía que no mojaba,
y, sin embargo,
ahogaba todos los instintos del temblor.
Yo, tan líquida, ¡no podía flotar!,
pero brotaba en cascada por la montaña
creando caminos de piedra
que la transparencia batía en nieve,
y desembocaba, siempre abrupta,
en la crin de un caballito de mar.
Hoy
(el ayer fue antes)
me gusta
la palabra Damasco
y el color de los arbustos.
¿En qué piensa una mimosa?
En posidonias,
en medusas delicadas,
en verrugas de pulpo,
en embriagadora belleza…
o, quizá,
en cactus de seda
deslizándose por el aire, ondulantes,
como el dibujo que las babosas
dejan en la arena,
creando caminos de niebla
que recomienzan al tocar fin.
Porque, aún la vida se asoma al riesgo
y provoca una avalancha de sol entre las flores.
Confirma que
acceder a la esperanza
es inhibir el miedo,
llegar al lugar relámpago
de la incertidumbre
donde solo la paciencia puede
transmutarse en risa de niño.
Risa de niño que come
el alimento de los alcornoques
mientras un sortilegio se cumple
y un manantial se derrama
y un cristal de hielo se rompe
en Finlandia o en los ojos amarillos
de las lechuzas.
¿Y antes?
Antes de ser agua, fui cielo.
Llanura invertida de astros
tormentas y golondrinas.
Pesadilla del desvelo
creando caminos de nubes
en las hojas de la tristeza.
Inventando la lluvia,
mojando la tierra seca
para agrietarla en cien
tentáculos de vidrio.
Esa humedad de la piel
que huele a nostalgia de labios
y a ternura azul
y a alma.
Porque
antes de ser cielo, fui sueño.
Semilla de hada
con nenúfar y largos cabellos,
Melusina después del grito
en el bosque profundo
creando caminos de cola de serpiente.
Mujer, amante, conjuro.
Otra vida que no conozco
se enlaza a la mía y me pregunta
qué hacer con lo indecible.
Escribirlo, contesto, con el peso
rotundo de las palabras,
rellenando el vacío que nos vierte
el futuro desde su incógnita.
Pero ahora soy luz, dádiva, puente.
Mis piernas de fuego conectan extremos
que encienden un bullicio agudo
en el centro oblicuo de mi vientre.
Miro tu boca con deseo
y allí me quedo,
cerca del latido porque,
antes de ser nada,
ya vibraba mi amor sobre tu pecho.
Ana Sánchez Huéscar
Très bien,. Votre dernier écrit est l’un des plus, sinon celui que j’ai le plus aimé depuis que vous avez commencé à écrire de la poésie, il est très fidèle à votre façon d’écrire, j’ai adoré un câlin et comme toujours, en attendant un autre de vos écrits, un bisou et prends soin de toi amie Ana
Traducción en directo
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¡Merci beaucoup! Aprecio un montón tu opinión y te agradezco sinceramente que sigas leyéndome. Un abrazo.
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