Que la serpiente espere bajo
su mata
y la escritura
sea de palabras lentas y rápidas, agudas
para herir, pacientes para esperar,
insomnes.
William Carlos Williams, A MANERA DE CANCIÓN
Tenemos tendencia a perseverar en el desconocimiento como defensa ante la oscuridad que nos rodea, ¡mejor no saber!, buscamos la tranquilidad de la bruma como respuesta al desasosiego de las tinieblas, la mayoría de las veces, incluso, nos refugiamos en la indiferencia, ¡bálsamo de inadaptados!, cualquier cosa, antes que la frustración,
Vivo en la periferia, tengo mi rincón favorito, la obsesión:
Me pregunto, una y otra vez, acerca de la Poesía, obviando si es pregunta estética o existencial, si voy en busca de la Belleza ―Ideal inaccesible y cambiante― o me arrastro tras el Ser ―Certeza desconocida que vive entre el desconcierto y la duda―, aunque, en el fondo, sé que la verdadera lucha siempre es existencial, agonía prolongada entre la Realidad y el Yo, entre la Luz y la Oscuridad, ente la Razón y el Sentimiento,
Se trata de Poesía:
Mirada que el poeta lanza hacia lo que le rodea para mostrarse y demostrarse vivo, Mirada que, una vez verbalizada, nos asombra tanto como para forzarnos a sentir y/o pensar, Mirada que es resaca de paraísos perdidos, aquellos espacios que por inexistentes son más deseados,
Palabra que nace muy a su pesar, parto de inseguridad, Palabra disfrazada de luz que anhela la espesura del bosque, Palabra que llega hasta nosotros para anticipar o adivinar, Palabra que se ahoga entre la duda y el miedo,
Se trata de Poesía:
Relación ilusoria entre lo que es y lo que no es ―azar y posibilidad―, entre quien no está y quien deseamos que esté ―ausencia y nostalgia― y entre lo que permanece o, por el contrario, se va ―tiempo y dolor―,
Se trata de Poesía:
Intento por reconciliarnos con nosotros mismos después de la experiencia de salir a la mañana y descubrir que no hay otro sueño posible que la Realidad.
Manuel Cardeñas Aguirre
(Fotografía de cabecera, Autora: Frieke Janssens)